Colesteatoma
El colesteatoma es un problema del oído que tiene un crecimiento lento y progresivo, pudiendo destruir el hueso de su alrededor y otras estructuras del oído, llevando incluso a la sordera. Conoce qué puede provocarlo.

Causas del colesteatoma y tipos

Por: Dr. Miguel Vacas Córdoba

Especialista en Medicina Interna del Hospital Universitario Príncipe de Asturias

Actualizado: 28 de julio de 2022

Los colesteatomas se pueden clasificar en congénitos, adquiridos y postquirúrgicos, siendo los adquiridos los más frecuentes (98% de los casos).

  • Colesteatoma congénito: es raro, y surge típicamente en niños. Es aquel que aparece detrás de un tímpano intacto en niños que no han tenido previamente enfermedades del oído medio (otitis). El origen del epitelio escamoso en el colesteatoma congénito es un tema controvertido, siendo la teoría más aceptada una alteración del desarrollo embrionario (dado que no es infeccioso, en el desarrollo fetal del oído existe alguna alteración que da origen al queratoma).
  • Colesteatoma adquirido: aparecen después del nacimiento, frecuentemente como resultado de enfermedades crónicas del oído medio. Puede ser primario o secundario.
    • Primario (bolsas de retracción): el más frecuente. En aquellas personas que tienen una alteración crónica en el funcionamiento de la trompa de Eustaquio se generan presiones negativas mantenidas en el oído medio, dando lugar a la formación de una bolsa de retracción. Ésta progresivamente va ocupando espacio en forma de bolsillo en el oído medio, donde quedan atrapadas células descamativas que forman el colesteatoma. El epitelio escamoso tiene la capacidad de erosionar el hueso, afectando primero a la delicada cadena de huesecillos y después el hueso temporal. Además, los depósitos de queratina se pueden infectar por la humedad o tras infecciones del oído medio, apareciendo así supuración purulenta en el oído.
    • Secundario: las células descamadas del epitelio del oído externo pasan a través de perforaciones del tímpano hacia el oído medio, acumulándose y formando el colesteatoma.

      Los factores que predisponen a padecer un colesteatoma adquirido incluyen: tener antecedentes personales de otitis media recurrente o secreción mantenida en el oído medio, malformaciones craneofaciales, historia familiar de patología crónica del oído medio o colesteatoma, colocación de tubos de timpanostomía, diferentes síndromes (síndrome de Turner, síndrome de Down…) o la existencia de paladar hendido.

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