La prediabetes podría afectar al 25% de los adultos
13/02/2014
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2025 habrá más de 300 millones de personas con diabetes en todo el mundo. De hecho, se estima que en la actualidad entre un 20 y un 25% de los adultos podrían padecer prediabetes, una condición previa al desarrollo de diabetes mellitus tipo 2 que no presenta síntomas, por lo que la mayoría de los afectados no están diagnosticados.
La prediabetes, que se caracteriza por unos niveles de glucosa en sangre superiores a lo normal (por debajo de los 100 mg/dl), aumenta significativamente las posibilidades de terminar desarrollando diabetes, especialmente si se acompaña de otros factores de riesgo como obesidad –sobre todo si el exceso de grasa se acumula en la zona abdominal–, sedentarismo, antecedentes familiares de la enfermedad o haber sufrido diabetes gestacional, o una dieta inadecuada (rica en grasas y con escasez de frutas y verduras).
La prediabetes –niveles de glucosa en sangre entre los 100 y los 125 mg/dl–, aumenta el riesgo de desarrollar diabetes, sobre todo en mayores de 45 años con sobrepeso
Tener más de 45 años también incrementa las posibilidades de desarrollar diabetes. Por ello, los expertos recomiendan que las personas que tengan uno o más de los factores de riesgo mencionados se realicen las pruebas que permiten detectar prediabetes:
- Glucosa en ayunas, con el que se miden los niveles de glucosa mediante un análisis de sangre (se considera prediabetes si los niveles se encuentran entre los 100 y los 125 mg/dl).
- Tolerancia a la glucosa. El paciente toma una bebida con un elevado contenido en glucosa y, dos horas después se le realiza un análisis de sangre para comprobar la capacidad de su organismo para procesarla. Si los niveles de glucosa en sangre se sitúan entre los 140 y los 200 mg/dl se considera prediabetes.
Para prevenir la prediabetes, los especialistas aconsejan practicar ejercicio físico con regularidad, controlar el peso, y seguir la dieta mediterránea, caracterizada por el consumo de aceite de oliva y las legumbres, añadiendo la ingesta de nueces y productos integrales, y reduciendo las grasas animales y los azúcares.
Actualizado: 1 de agosto de 2017