Complicaciones de una fibrilación auricular
Actualizado: 22 de septiembre de 2022
La complicación más importante de la fibrilación auricular es el infarto cerebral (embolia cerebral). Al no producirse una contracción efectiva de la aurícula se pueden producir coágulos en su interior. Si estos coágulos se desprenden pueden viajan por los vasos sanguíneos del organismo. A los coágulos desprendidos que circulan por la sangre les denominamos émbolos.
Los primeros vasos que hay tras la salida del corazón son los que se dirigen al cerebro, por ello es frecuente que los émbolos acaben obstruyendo un vaso cerebral dando lugar a un infarto cerebral.
Los émbolos originados en las aurículas pueden acabar obstruyendo cualquier arteria del organismo como las arterias del ojo, el riñón, las extremidades, etcétera, dando síntomas muy diferentes según el órgano afectado.
Sin una terapia preventiva (con medicamentos anticoagulantes) el riesgo de que se produzca un infarto cerebral secundario a una fibrilación auricular es del 1,3% anual en personas de 50 a 59 años de edad. El riesgo se incrementa con la edad y llega a ser del 5% anual en personas de 80 a 89 años de edad.
Creado: 3 de julio de 2012