Qué es el nistagmo
Actualizado: 21 de septiembre de 2022
Se llama nistagmo ocular a la presencia de movimientos involuntarios de vaivén de los ojos, rítmicos y repetidos. El nistagmo puede ser de un lado a otro (horizontal), arriba y abajo (vertical), o rotatorio, y su velocidad puede variar entre un movimiento rápido o lento. No hay que confundir el nistagmo patológico con el nistagmo fisiológico, que sucede al ver un objeto que se mueve o al girar la cabeza, o cuando se llevan los ojos a una posición extrema.
En los nistagmos presentes al nacer, o que aparecen poco después (entre las 3 semanas y antes de los 6 meses de edad), se debe realizar una valoración neuro-oftalmológica completa. Afortunadamente es un problema poco frecuente, y si no se asocia a otros problemas sensoriales, puede tener buen pronóstico. En los casos en los que se asocia a otros problemas neurológicos o sensoriales, la agudeza visual se puede ver más comprometida y aparecer visión borrosa, pero también el equilibrio o la coordinación según señala la Academia Americana de Oftalmología (AAO).
En los adultos, el nistagmo puede ser el síntoma delator de un problema neurológico importante como la esclerosis múltiple o un tumor cerebral, pero en otras ocasiones, conocido como nistagmo adquirido, puede ser por el uso de algún fármaco (como la fenitoína), por drogas (como la ketamina o el éxtasis), o por consumo excesivo de alcohol, cediendo tras suspender su uso. Otras veces se asocia a un simple vértigo sin mayor repercusión posterior. A diferencia del ocurrido en niños, sí puede aparecer visión temblorosa.
Qué hacer en caso de sufrir nistagmo
Cualquier persona que tenga un nistagmo conviene que en todo caso consulte con su médico para que le realice una evaluación que incluya una exploración neurológica completa y un estudio de las posibles causas. La resonancia magnética nuclear cerebral es la prueba de elección para el estudio de esas causas, aunque habitualmente la tendrá que solicitar el neurólogo en el ámbito de la atención especializada.
Según la causa del nistagmo se pueden realizar diversas medidas de tratamiento, como puede ser una lente correctora (gafas), tapar el ‘ojo vago’ en el caso de los niños con nistagmo y ambliopía… En otras ocasiones hay que recurrir a algunas técnicas quirúrgicas. Los fármacos no suelen ser muy útiles para el tratamiento del nistagmo, aunque por supuesto esto depende sobre todo del tipo y de la causa.
Creado: 8 de septiembre de 2016