Pian
El pian es una enfermedad tropical causada por una bacteria (treponema) que afecta a la piel, los huesos y el cartílago, sobre todo de los niños. Conoce sus síntomas, cómo se contagia y qué tratamiento puede erradicarla.

Síntomas del pian

Niño de raza negra afectado por pian

El pian se inicia con una o varias lesiones cutáneas.

Por: Dr. Miguel Vacas Córdoba

Especialista en Medicina Interna del Hospital Universitario Príncipe de Asturias

Actualizado: 29 de julio de 2022

El período de incubación de esta enfermedad –antes de que se aprecien los primeros síntomas del pian– oscila entre 9 y 90 días, siendo lo más común que se sitúe en torno a unas tres semanas. La lesión inicial del pian, denominada protopianoma, consiste en una o varias lesiones cutáneas de pequeño tamaño y color rojizo, que crecen rápidamente y forman una masa papilomatosa y ulcerada con aspecto similar a una frambuesa. Esta lesión, que se localiza en la zona por la que ha penetrado la bacteria en la piel, no suele ser dolorosa, aunque sí causa picor en algunas ocasiones. En el exudado que emite pueden visualizarse al microscopio los treponemas causantes del pian, siendo éste el método diagnóstico de elección.

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Además, es frecuente la presencia de uno o varios ganglios linfáticos inflamados en la región corporal donde se encuentra el protopianoma, aunque no tienen por qué ser dolorosos. Esta lesión inicial cura espontáneamente, dejando una cicatriz; puede persistir durante meses y estar ausente en el 10% de los casos, que se inician con lesiones secundarias.

La fase correspondiente al período secundario comienza al cabo de 3-12 meses de la infección y se caracteriza por la aparición de una erupción en la piel, a menudo bilateral y simétrica (es decir, afecta a ambos lados del cuerpo de forma similar), que predomina en las proximidades de los orificios corporales. Estas lesiones se denominan pianomas. Pueden ser de diferentes tamaños, y en ocasiones están recubiertas de costras y exudados. La afección de las plantas de los pies, que es muy característica, produce mucho dolor. En los niños son frecuentes las lesiones óseas.

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Las manifestaciones terciarias afectan a un 10% de los pacientes. Pueden aparecer junto a las lesiones secundarias, o después de un período libre de síntomas. Estas lesiones pueden llegar a afectar al cartílago y a estructuras óseas, produciendo lesiones en las articulaciones y en los huesos.

En algunos casos, fundamentalmente en pacientes no tratados con antibiótico, se pueden producir lesiones muy agresivas como mutilación de la parte central de la cara, lo que se conoce en términos médicos como gangosa. El pian no afecta nunca al sistema nervioso central. 

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