Tratamiento del pian
Especialista en Medicina Interna del Hospital Universitario Príncipe de Asturias
Actualizado: 29 de julio de 2022
Dado que se trata de una enfermedad infecciosa, el tratamiento del pian consiste en la administración de antibióticos. El tratamiento de elección es la azitromicina, administrada en una única dosis por vía oral, o la penicilina benzatina por vía intramuscular, administrada también en una única dosis. En el caso de la penicilina, en niños menores de 10 años se utiliza la mitad de la dosis que en adultos.
Si el paciente es alérgico a estos antibióticos se pueden utilizar otros como las tetraciclinas, la eritromicina o la doxiciclina.
El pronóstico para el pian es bastante bueno en la mayoría de los casos, consiguiéndose la curación completa en gran parte de los pacientes. Sin embargo, si no se instaura ningún tratamiento, un 10% de los enfermos sufren complicaciones importantes como deformidades, o discapacidad por presentar mayor dificultad para movilizar ciertas articulaciones.
Prevención del pian
No hay ninguna vacuna contra el pian que evite su aparición. La prevención de esta enfermedad va encaminada a interrumpir la transmisión entre personas mediante el diagnóstico temprano, evitándose así el contagio. La educación sanitaria y el desarrollo de medidas para conseguir una mejor higiene personal son componentes esenciales de la prevención.
Todas aquellas personas que conviven o han estado en contacto estrecho con pacientes diagnosticados de pian deberían acudir a su médico para ser examinados e iniciar el tratamiento lo más rápido posible si presentan lesiones compatibles.
Creado: 13 de junio de 2014