Qué es la trombosis venosa
Por: David Saceda Corralo
Médico Interno Residente, especialista en Dermatología Medicoquirúrgica y Veneorología
Actualizado: 30 de septiembre de 2022
La sangre en nuestro cuerpo se encuentra en estado líquido para poder así circular a través de arterias y venas; tan sólo se coagula cuando es necesario cortar el flujo sanguíneo (por una herida, por ejemplo). Para que esto suceda hay una serie de elementos anticoagulativos y procoagulativos disueltos en la sangre, que se encuentran en equilibrio. Sin embargo, este mecanismo no siempre funciona correctamente y en ocasiones la sangre se coagula durante la circulación formando un trombo que impide la circulación sanguínea, y es entonces cuando se produce la trombosis venosa.
Para hacernos una idea del impacto de este problema en la salud de las personas, dos datos: cada minuto una persona es diagnosticada de trombosis en el mundo; y cada 6 minutos, alguien fallece como consecuencia de esta enfermedad, según apuntan desde la Sociedad Española de Trombosis y Hemostasia (SETH). Por tanto, el tromboembolismo venoso es una causa importante de muerte y discapacidad en todo el planeta, ya que supone la tercera causa de mortalidad cardiovascular tras el infarto agudo de miocardio y el ictus, afectando por igual a hombres y mujeres.
Los trombos pueden suceder tanto en las arterias como en las venas, pero es mucho más frecuente que se produzcan en los vasos venosos, especialmente en las venas de las piernas. Esto es así por varios motivos: en primer lugar, la sangre venosa recoge las sustancias de desecho de los órganos corporales y es pobre en oxígeno, lo que favorece que se active la coagulación; en segundo lugar, las venas de las piernas se encuentran en la parte más inferior del cuerpo y a la sangre le cuesta mucho ascender hacia el corazón, quedando a veces estancada, lo que facilita su coagulación.
Dentro de las venas de las piernas podemos diferenciar dos tipos: las venas profundas y las venas superficiales.
Creado: 29 de junio de 2012