Telegeriatría, la consulta desde casa
En tiempos de coronavirus, gripes y consultas saturadas, la telegeriatría permite a los adultos mayores recibir atención médica sin salir de su domicilio gracias al empleo de las nuevas tecnologías en el ámbito de la salud.

Beneficios de la telemedicina para los adultos mayores

Por: Marina García

Periodista, experta en salud y tercera edad

Actualizado: 28 de junio de 2022

Los beneficios de la telemedicina son aplicables a toda la población, pero son las personas mayores –a las que va dirigida la telegeriatría–, y especialmente las que se encuentran en situación de dependencia, las que padecen una enfermedad crónica, o aquellas que viven alejadas del centro sanitario, las que más partido obtienen de esta tecnología porque:

  • Evita que tengan que desplazarse al centro sanitario para una simple revisión.
  • Reduce su grado de dependencia, porque gracias a servicios como la teleasistencia pueden reclamar ayuda cuando lo necesiten.
  • Disponen de atención médica 24 horas al día.
  • Ofrece la posibilidad de saber si el tratamiento está resultando efectivo, e incluso variarlo si el médico lo ve necesario, sin tener que aguardar listas de espera.
  • Proporciona seguridad al paciente porque sabe que está controlado, y reduce el estrés que supone desplazarse al centro sanitario y esperar.
  • Puede consultar dudas desde casa, lo que evita errores en la toma de medicamentos y la falta de adherencia al tratamiento.
  • Permite que se puedan realizar cirugías que hace unos años no se podían llevar a cabo en personas mayores por su complejidad, duración y riesgo.

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Ventajas de la telemedicina para el sistema sanitario

Pero la telemedicina no solo es una gran ayuda para los pacientes, también lo es para el sistema sanitario en general porque:

  • Ofrece la posibilidad de realizar diagnósticos precisos a través de una imagen recibida (algo implantado en dermatología y podología).
  • Reduce las listas de espera.
  • Reduce las atenciones en los servicios de urgencias y las hospitalizaciones; así como las falsas alarmas, porque si el paciente está monitorizado se puede saber realmente si está teniendo un problema de salud, o es un simple susto.
  • Favorece la eficacia de los tratamientos gracias al seguimiento exhaustivo que se realiza al paciente.
  • Reduce el uso de los recursos sanitarios y, por tanto, costes.
  • Reduce el tiempo de detección de un problema clínico del paciente o de un dispositivo que lleve instalado (como puede ser un marcapasos), así como la resolución del mismo, con mayor precocidad que mediante un seguimiento rutinario.
  • Permite realizar cirugías con mayor precisión, y menos duración y riesgo para el paciente, utilizando menos recursos.

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Creado: 27 de abril de 2016

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