Algarve para mayores, visitas que no te puedes perder

El Algarve se extiende a lo largo de 240 kilómetros de costa, por lo que si te apetece, y dispones de suficiente tiempo, puedes recorrerlo en coche y conocer una selección de sus encantadores y pintorescos pueblos y espléndidas playas. En temporada alta, especialmente durante julio y agosto, es aconsejable reservar previamente el alojamiento, pero si viajas en otoño y primavera –las mejores estaciones porque es mucho más barato y se evita la masificación veraniega–, puedes improvisar y elegir sobre la marcha el lugar donde deseas hospedarte. Hay más de cien playas para escoger, y numerosos rincones que merecen una visita, pero hemos seleccionado unos cuantos, especialmente indicados para adultos mayores, que no deberías perderte si vas a pasar tus vacaciones en el Algarve:

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  Vila Real de Santo António

  Bonita localidad muy cerca de la frontera española; de hecho, puedes llegar aquí en autobuses que salen diariamente desde Ayamonte (Huelva), y también en un ferry que te permitirá admirar el paisaje del río y la fortaleza de Castro Marim. Puedes recorrer paseando su casco histórico (Zona Histórica Pombalina, Igreja Matriz de Nossa Senhora da Encarnação, Praça Marques de Pombal, o la Zona Ribeirinha, entre otros lugares de interés) y, a solo cinco kilómetros, disfrutar de la popular Playa de Monte Gordo, donde también puedes alojarte, comer, o cenar, en uno de los numerosos hoteles y restaurantes que la rodean.

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  Tavira

  Muy popular, pero menos masificada que otros destinos del Algarve, esta ciudad fue destruida por un terremoto en 1755, y reconstruida posteriormente. Un paseo por la ribera del río te permitirá descubrir sus callejuelas, salpicadas de coquetos cafés, boutiques de moda, y restaurantes donde saborear pescado fresco. Aquí también podrás tomar un ferry para visitar la Ilha de Tavira, un espacio natural protegido que dispone de una extensa playa, o un autobús que te dejará en Santa Luzía, un pintoresco pueblo de pescadores, a tres kilómetros de Tavira, donde puedes ser testigo de la pesca del pulpo, e incluso degustarlo en uno de sus restaurantes.

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  Albufeira

  El casco antiguo de este bonito pueblo ofrece una animada vida nocturna, y es la localidad con la mayor cantidad de playas galardonadas con bandera azul de Portugal, entre ellas la Playa de Santa Eulália, la Playa da Gale Leste, la Playa de Falesia o la Playa dos Olhos d’água. Si practicas golf, junto a Albufeira encontrarás varios campos, como el de Salgados, situado en un entorno privilegiado próximo a la costa, o el Balaia Golf Village, con 9 hoyos de par 3, y muy apropiado para los que se estén iniciando en este saludable deporte. Otra de sus ventajas es que se encuentra relativamente cerca del aeropuerto de Faro.

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  Vilamoura

  Coqueta localidad conocida por su puerto deportivo y sus campos de golf, ideal para realizar excursiones en barco y avistar delfines, o conocer las grutas que salpican la costa y, por supuesto, para jugar al golf. Es un lugar caro y con glamour, con construcciones modernas y restaurantes de calidad donde degustar platos típicos de la zona, pescados y mariscos.

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  Lagos

  Es una de las ciudades más visitadas del Algarve por encontrarse situada junto a playas de gran calidad como la Praia de Dona Ana o Meia Praia. Pero, además de sus espectaculares playas, Lagos tiene otros alicientes turísticos porque fue base del comercio con las colonias portuguesas de África, y conserva reminiscencias del pasado como el antiguo mercado de esclavos, o el monumento a São Sebastiao. A bordo de su tren turístico obtendrás, cómodamente, las mejores vistas de la localidad. Desde aquí salen autobuses que te permitirán realizar una excursión de un día a Sagres, conocida por los portugueses como el fin del mundo, y visitar la Fortaleza de Enrique el Navegante, o bañarte en alguna de sus playas, mucho menos concurridas que las de Lagos.

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  Faro

  Es la capital del Algarve y la ciudad más grande del sur de Portugal. Dispone de aeropuerto, por lo que es un buen punto de partida para recorrer la región. Su casco histórico no es muy antiguo porque fue reconstruido tras el terremoto de 1755, pero es interesante visitar la amurallada Cidade Velha, en la bahía. Esta ciudad se distancia del turismo de sol y playa del resto del Algarve, y está especialmente indicada para ir de compras, pasear, o sentarse a tomar algo en la zona peatonal que da paso al centro amurallado o a la catedral. Faro es, además, el extremo occidental del Parque Natural de la Ría Formosa, al que se puede acceder desde aquí contratando uno de los paseos en barco que ofrecen empresas de excursiones en la zona de la marina.

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  Parque Natural de la Ría Formosa

  Los amantes de la naturaleza deberían aprovechar su estancia en el Algarve para visitar el que ha sido nombrado recientemente como una de las ‘7 maravillas naturales de Portugal’, una zona protegida de alrededor de 18.000 hectáreas, que se extiende a lo largo de los municipios de Loulé, Faro, Olhão, Tavira y Vila Real de Santo António. Con una impresionante variedad de flora y fauna, se considera un auténtico paraíso para los aficionados a observar a las aves. Se puede visitar en paseos guiados, en bicicleta, en lancha o en kayak.